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 Miércoles
1 - Sábado 11 de Noviembre (sigue) |
Día
5: la previsión del tiempo tira a la basura todas
nuestras expectativas de tener una ventana de un par de días
con mejor tiempo para poder continuar el viaje, el pronostico
para los próximos 6 días es mas lluvia y fuertes
vientos del sur. Decidimos cambiar las cubiertas de la bici,
poner unas mas finas para poder ir mas ligeros e intentar recuperar
los días parados. Para llegar a la tienda de bicis, tenemos
que cruzar un río desbordado con una altura de agua de
un metro, los camiones que pasan en sentido contrario no nos
lo ponen demasiado fácil. A la vuelta, mirando internet,
descubrimos que hay mas lugares de la Hgw101 con el mismo problema,
de hecho esta cortada en un par de puntos situados al sur de
Seaside. Decidimos coger un autobús a Portland
En Pórtland tenemos que cambiar de autobús y nos
piden meter las bicis en cajas y pagar 20 dólares por
cada una de ellas. Nosotros nos hacemos los suecos y las metemos
en cajas pero no pagamos. Así que cuando toca subirlas
tenemos bronca con la autobús era, los que se encargan
de las maletas y una policía que pasaba por allí.
Mientras yo me "pego" con todos ellos Diego se encarga
de pagar los 40 dolores. El autobús sale un cuarto de
hora tarde por nuestra culpa y los pasajeros nos miran con cara
de odio mientras nos dirigimos a nuestros asientos en la ultima
fila. En Eugene toca volver a cambiar de bus
y esperar 2 horas en la estación.Conocemos gente muy
interesante:
-Psicópata
con tendencia a la obesidad.
-Pareja adicta a las tragaperras.
-Colombiano a un teléfono pegado.
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Especímenes
de autobús.
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El
trayecto siguiente se hace ameno escuchando un poco de música
y llegamos al pueblecito costero de Coos Bay donde
no llueve, pero ya es noche cerrada. Tiramos de cartera: comemos
en un Mc y dormimos en un motel.
A la mañana siguiente por fin volvemos a coger la bici,
el día esta gris y a eso de las doce llegamos a Bullards
State Beach. allí hay una especie de refugio
abierto con techo, electricidad y agua corriente. En ese preciso
instante, se desata la gran tormenta y decidimos quedarnos toda
la tarde y la noche allí. Ponemos música, cargamos
las baterías de la cámara y cuando la lluvia cesa
visitamos la playa llena de dunas. la lluvia vuelve a aparecer
así que volvemos a nuestro refugio donde dormimos a pierna
suelta. |
Playas solitarias
en Bullards State Beach
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Amanece soleado
y pedaleamos entre bosques de coniferas. En Port Orford
nos reencontramos con el Pacifico y la sonrisa ilumina nuestras
caras. Tras unos
km viendo acantilados y playas de arena negra decidimos parar
y pasar la tarde en un camping llamado Humbug Mountain
State Park. |
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